Las poblaciones en zonas de influencia de empresas y proyectos generadores de energía recibirán, a partir del año entrante, entre un 40 y 50 % más de dinero por transferencias (compensaciones) por el uso de los ecosistemas y fuentes naturales.
El incremento en los recursos se logró gracias a la aceptación de un requerimiento legal que interpuso hace dos años la corporación ambiental del Oriente y Magdalena Medio, Cornare, ante la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) y que fue confirmado durante las últimas horas por el Ministerio de Hacienda.
Desde 1993, la ley colombiana habla que las empresas generadoras del sector eléctrico deberán pagar transferencias a los municipios que hagan parte de cuencas y embalses, como compensación por los efectos al ecosistema generados por su actividad, un 3 % sobre las ventas de energía y otro 3 % a las autoridades de las respectivas zonas.
Según Carlos Mario Zuluaga, director de Cornare, si bien la norma buscaba beneficiar a los municipios impactados por la explotación de sus recursos naturales para la producción energética, la manera como se liquidaba la plata a pagarles a los territorios y corporaciones era injusta.
“Antes se liquidaba con base en la inflación proyectada y ahora, con el requerimiento fallado a nuestro favor, se hace a un promedio de tarifas en bolsa”, indicó.
Zuluaga explicó que durante 24 años la Creg no liquidaba con base en la inflación real (que es la que muestra un verdadero costo de vida), sino en una proyectada, lo que generaba unos valores muy por debajo de los presupuestados.
“Es decir, si hace 24 años estaba a 15 pesos el kilovatio, hoy nos lo liquidan a $75, mientras en la época el kilovatio podía estar a $200 y nos lo seguían liquidando a 75”, comentó y agregó que “con el requerimiento ganado logramos que se nos reconociera que las tarifas tengan que liquidarse con los precios del mercado”.