Esta norma profundiza y establece requisitos para poder llamar gestión energética a lo que se hace por elevar la eficiencia energética. Plantea nuevas formas de medir el desempeño energético que rompe con los viejos indicadores de consumo usados erróneamente para medir eficiencia, establece la gestión energética a nivel de control operacional de los procesos, plantea nuevos estándares de medición del desempeño energético y abre nuevos conceptos ya documentados en herramientas de trabajo, como el mantenimiento centrado en la eficiencia energética, líneas base de desempeño energético, indicadores de desempeño energético etc…
Por ello implementar un sistema de gestión energética según la Norma Internacional ISO 50.001, no es adaptar lo que hacemos hoy a un formato de mejora continua, característico de cualquier norma ISO, no es tampoco desarrollar un gran proyecto de renovación de equipos o inversión en tecnologías; siendo mucho más que eso, es implementar en la empresa nuevos conocimientos y herramientas, varios de ellos hasta ahora desconocidos por sus profesionales, para ser efectivos y consistentes con el control y el uso eficiente de la energía, que parte primero y ante todo, de la base de asegurar mejores prácticas energéticas.
Promover, divulgar y preparar al sector empresarial para entender el alcance y poder aplicar los requisitos que establece la norma ISO 50.001 y su familia de Normas de gestión energética, es una tarea a la que e2 energía eficiente, desde la óptica de una Empresas de Servicios Energéticos (ESE ó ESCO por sus siglas en inglés), se ha sumado a los esfuerzos que hoy muchos organismos internacionales como la Organización Mundial de Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial, el Organismo ISO, el Fondo Mundial de Medio Ambiente, han venido adelantando.